Nuevo jefe de la División de Neonatología y Medicina del Desarrollo designado por Stanford Children’s Health
El Dr. Lawrence (Lance) S. Prince, Phd, también se desempeñará como codirector del Johnson Center for Pregnancy and Newborn Services en el Lucile Packard Children’s Hospital Stanford, junto con el codirector, el Dr. Yasser El-Sayed, jefe de obstetricia.
PARA COMUNICAR EL 6 DE ENERO DE 2021.

PALO ALTO, California.— El Dr. Lawrence (Lance) S. Prince, PhD, médico, científico y clínico, fue seleccionado como jefe de la División de Neonatología y Medicina del Desarrollo en la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford, y como profesor de pediatría. También se desempeñará como codirector del Johnson Center for Pregnancy and Newborn Services en el Lucile Packard Children’s Hospital Stanford, junto con el codirector, el Dr. Yasser El-Sayed, jefe de obstetricia.
El Dr. Prince es reconocido por ser un médico científico distinguido, un clínico dedicado, un mentor generoso y un líder visionario. Anteriormente, trabajó como jefe de la División de Neonatología y como profesor de pediatría en la Universidad de California, San Diego, y en el Hospital Infantil Rady de San Diego. Antes de trabajar en California, fue profesor adjunto de pediatría en la Universidad Vanderbilt.
En Stanford Children’s Health, el Dr. Prince hará crecer el liderazgo de la División de Neonatología tanto en la atención como en la investigación clínica. La División de Neonatología del Packard Children’s Hospital recibió recientemente el puesto número 3 de los mejores hospitales para niños de la encuesta U.S. News & World Report 2020-2021.
“Estamos muy felices de darle la bienvenida al Dr. Lance Prince al Stanford Children’s Health”, dijo Paul King, presidente y director ejecutivo del Stanford Children’s Health. “Trae consigo experiencias y habilidades impresionantes que se suman a nuestro programa, y más allá de eso, es una persona excepcional. La dedicación sincera del Dr. Prince al cuidado de la salud de los pacientes más jóvenes es la base de nuestra misión, y esperamos recorrer un largo y exitoso camino juntos”.
Supervisión de la atención del recién nacido en todas las etapas de complejidad
En el Stanford Children’s Health’s, el Dr. Prince supervisará los múltiples niveles de cuidado para bebés prematuros y bebés con enfermedades críticas, lo que incluye el servicio integral de neonatología para recién nacidos, entre ellos los cuidados para recién nacidos microprematuros, en todas las etapas de complejidad. Los bebés que no padezcan de enfermedades críticas serán atendidos en la Sala de Recién Nacidos del hospital y, según la gravedad de sus necesidades, recibirán un cuidado más intensivo en la Sala de Cuidados Intermedios de Nivel II, una Unidad de Cuidados Intensivos para Neonatos de Nivel IV de 40 camas, y dos unidades especializadas que trabajan no solo en la prevención de lesiones cerebrales sino también en la promoción del desarrollo cerebral.
Una de ellas es la Unidad de Cuidados Intensivos Neurológicos Neonatales, que se encarga de atender a bebés prematuros y nacidos a término que están en riesgo con herramientas de monitoreo y evaluación que les permiten a los médicos clínicos controlar la fisiología y el funcionamiento del cerebro de los recién nacidos. La NICU neurológica utiliza técnicas avanzadas, como la hipotermia terapéutica, para minimizar el daño en cerebros jóvenes. La otra unidad cuenta con siete camas, y se la conoce como “el nido” (unidad para bebés pequeños) dentro de la NICU, y se encarga del cuidado de los bebés más jóvenes y pequeños. Aquí, un equipo especializado utiliza protocolos y equipamiento específico, lo que incluye protocolos de ventilación que minimizan la posibilidad de futuras complicaciones respiratorias, así como otros enfoques que contemplan las necesidades médicas y de desarrollo únicas de estos frágiles bebés.
El Dr. Prince también supervisará el Programa especializado para el Cuidado Cardíaco y Respiratorio de Bebés con Displasia Broncopulmonar (CRIB, por sus siglas en inglés), el cual reúne a cardiólogos, pulmonólogos y neonatólogos para trabajar en enfermedades cardíacas y pulmonares asociadas al nacimiento prematuro. El Dr. Prince ha desarrollado un enfoque multidisciplinario y colaborativo para investigar y tratar uno de los desafíos más difíciles de la neonatología: la displasia broncopulmonar (DBP) en bebés extremadamente prematuros, y su laboratorio, que trabaja con fondos del Instituto Nacional de la Salud (NIH), se enfoca en los mecanismos moleculares y celulares que controlan el desarrollo de los pulmones.
“Estoy muy contento de sumarme al Stanford Children’s Health, que no es únicamente un epicentro del descubrimiento y el avance médicos, sino que también es un lugar donde se provee atención con la mayor compasión y apoyo posible para las familias”, dijo el Dr. Prince. “Como médico científico, me inspira el espíritu de innovación y me emociona liderar un equipo cuya tarea para mejorar la atención de mujeres embarazadas y recién nacidos se guía por estos valores”.
Desarrollar la investigación para nuestros pacientes más pequeños
El Dr. Prince tiene una licenciatura en química de la Universidad de Miami. Es doctor en medicina con enfoque en biología celular de la Universidad de Alabama en Birmingham, y completó una beca de investigación postdoctoral, una residencia en pediatría y una capacitación sobre becas de investigación de medicina neonatal y perinatal en la Universidad de Iowa. Su trabajo de investigación trascendental hizo contribuciones fundamentales para el entendimiento científico de los mecanismos moleculares que conectan el sistema inmunológico innato, las vías inflamatorias y el desarrollo pulmonar.
Los científicos de Stanford lideran el campo de la prevención del nacimiento prematuro mediante investigaciones realizadas en el March of Dimes Prematurity Research Center, en la Universidad de Stanford. El centro, que es el primero en su tipo, se fundó con una donación de USD 20 millones realizada por March of Dimes en 2011, y desde entonces ha generado numerosos avances en el campo.
En 2018, por ejemplo, los investigadores de Stanford desarrollaron un análisis de sangre nuevo y no invasivo que puede predecir los nacimientos prematuros. Al analizar las muestras de sangre de mujeres embarazadas, el equipo pudo predecir los nacimientos prematuros con una precisión de entre el 75 % y el 80 %. El análisis también puede predecir la fecha del nacimiento con la misma exactitud que un ultrasonido prenatal.
El Lucile Packard Children’s Hospital Stanford, hogar del Johnson Center for Newborn and Pregnancy Services, es el único hospital independiente para niños del área de la Bahía de San Francisco, y uno de los pocos existentes en el país, que ofrece servicios complejos de fertilidad, obstetricia, nacimientos, neonatología y pediatría. El equipo combina la experiencia de más de veinte subespecialidades médicas y quirúrgicas, que incluyen la medicina maternofetal, genética perinatal, neonatología, y radiología, cirugía y cardiología pediátricas y fetales.
Contactos con la prensa
Kate DeTrempe
media@stanfordchildrens.org
(650) 721-8527