Programa de cirugía sin sangre pediátrica

Cuando se necesita, la sangre donada puede salvar la vida. Pero cada vez más estudios revelan que pequeños pacientes de cirugía que pueden renunciar al uso de los productos de sangre donada obtienen mejores resultados en varios aspectos:

• los pacientes de cirugía sin sangre son más resistentes a infecciones
• es menos probable que sufran respuestas inmunológicas adversas
• estos pequeños pacientes de cirugía pasan menos tiempo en recuperación

Para aprovechar mejor este conocimiento, el Programa de cirugía sin sangre en el Betty Irene Moore Children’s Heart Center está perfeccionando tecnologías y técnicas que ayudan a nuestros pacientes de corazón más pequeños a prosperar. Cuando podemos ayudar a los pacientes a evitar el uso innecesario de productos de sangre, es mejor para la salud del paciente, para la reserva de sangre para emergencias y para el control de los costos de atención médica.

Qué esperar

En las semanas antes de una cirugía sin sangre programada, los médicos pueden preparar al paciente al reforzar sus hematocritos con suplementos de hierro y medicamentos y preservar los niveles de glóbulos rojos al minimizar la cantidad de sangre que se saca para análisis. Durante una operación, se toman pasos "de cirugía sin sangre" especiales y se utiliza equipo especial para minimizar la pérdida de la propia sangre del paciente. Al manejar los líquidos de manera cuidadosa y optimizar de nuevo las muestras de sangre después de la cirugía, se puede recuperar rápidamente cualquier pérdida de sangre. Aunque estas prácticas ya han sido aceptadas por pacientes que, por razones personales o religiosas, prefieren no utilizar productos de sangre, los beneficios médicos aplican a una población mucho más amplia. Aprenda más >