Resumen del programa de hidrocefalia
La palabra "hidrocefalia" se deriva de las palabras griegas para "agua" y "cabeza" y se traduce más o menos como "agua en el cerebro". Se refiere a una dolencia que afecta aproximadamente a uno de cada 500 bebés nacidos, en la que el exceso de líquido cefalorraquídeo se acumula en el cerebro, y algunas veces provoca que la cabeza se inflame y ponga presión en el tejido cerebral sensible. Si no se trata, la hidrocefalia puede provocar problemas de salud y cognitivos graves. Afortunadamente, en la mayoría de los casos de hidrocefalia, la afección se puede tratar de manera segura y efectiva. Una nueva estrategia al tratamiento llamada endoscópica del tercer ventrículo, o ETV por sus siglas en inglés, despliega herramientas quirúrgicas innovadoras para liberar el flujo natural de líquido cefalorraquídeo en el sistema nervioso central y, en algunos casos, para reducir la cantidad de líquido producido. Esta nueva técnica, iniciada aquí en el Lucile Packard Children’s Hospital Stanford, es segura y efectiva, y evita muchos de los riesgos asociados con la estrategia tradicional. Hasta hace poco, la única manera efectiva de tratar la hidrocefalia era implantar de manera permanente un tubo sintético, llamado derivación, para drenar el exceso de líquido cefalorraquídeo del cerebro a la cavidad abdominal, en donde el cuerpo lo podía absorber. Ya que el método nuevo, ETV, no requiere de derivación, reduce el riesgo de infección y elimina la necesidad de más procedimientos quirúrgicos en la vida para muchos pacientes de hidrocefalia. Lea más sobre la afección y el tratamiento de la hidrocefalia.