Pañales/Erupción del Pañal

¿En qué consiste el cambio de pañales?

El cambio de pañales es una parte esencial del cuidado del bebé. Hasta que el niño aprende a usar el baño, generalmente a los 3 años de edad, se usan los pañales para recoger las deposiciones y la orina. Se calcula que un bebé usa entre seis y diez pañales por día (es decir, aproximadamente entre 2000 y 3000 pañales por año). Al tener que realizar tantos cambios de pañales, los padres desean aprender a hacerlo con mayor rapidez y facilidad.

Por lo general, hay dos opciones: pañales de tela o desechables, y cada tipo de pañal tiene sus ventajas y desventajas. No se puede decir con precisión cuál es mejor. Los padres debe decidir cuál es la mejor opción para su bebé y su familia en particular. En muchos casos, la familia decide utilizar ambos tipos. A continuación se enumeran las ventajas y desventajas de cada tipo de pañal.

Pañales de tela

Ventajas

Desventajas

  • Suaves para la delicada piel del bebé

  • Servicio de entrega disponible

  • Más económicos que los desechables

  • Pueden volver a utilizarse

  • Permiten que la piel del bebé respire y ayudan a curar la erupción del pañal

  • Están disponibles en una variedad de niveles de absorción y texturas

  • Puede haber filtraciones, deben utilizarse con una cubierta impermeable o ropa interior

  • El lavado en el hogar demanda mucho tiempo

  • Para desinfectar los pañales de tela se debe utilizar agua, detergente y energía

  • Difícil de usar en caso de viajes

Pañales desechables

Ventajas

Desventajas

  • Son convenientes y desechables

  • Protegen la piel del bebé de la humedad gracias al material absorbente que ayudar a prevenir la erupción del pañal

  • Fácil de usar en caso de viajes

  • Se desechan en áreas residuales sanitarias de materiales y heces no-biodegradables

  • Muchos padres esperan a que el pañal esté completamente saturado para cambiarlo, lo cual aumenta el riesgo de erupción

  • Son más costosos

Cómo cambiarle el pañal al bebé

Muchos padres primerizos sienten que cambiar el pañal a un bebé que se retuerce es una tarea complicada. Las primeras experiencias pueden ser frustrantes, si los padres no saben cómo manejar al bebé o cómo colocar el pañal. Sin embargo, no les llevará mucho tiempo sentirse cómodos a la hora de cambiar pañales, y la mayoría de los padres logran hacerlo muy bien.

A continuación, le proporcionamos algunos consejos para que pueda cambiar pañales correctamente y se sienta cómodo al hacerlo:

  • Coloque un cambiador o un tapete sobre una superficie a la altura de su cintura. De este modo, evitará inclinarse y forzar la espalda.

  • Tenga a su alcance los pañales, toallitas y todos los elementos necesarios. No descuide al bebé en ningún momento, ni siquiera por un instante.

  • Recueste al bebé en un tapete lavable o desechable, apoyado sobre la mesa para cambiar pañales.

  • Coloque al bebé sobre la mesa de cambiar pañales con la cabeza hacia la derecha o izquierda. A la mayoría de los padres les resulta más fácil colocarlos hacia un lado más que al otro.

  • Abra un pañal limpio y apártelo.

  • Despegue las cintas adhesivas o broches del pañal sucio. Sostenga las piernas del bebé con una mano y tire la parte delantera del pañal hacia abajo con la otra.

  • Si el pañal está sucio, limpie las deposiciones con la parte delantera del pañal, pasándolo por sobre la piel del bebé hacia la parte trasera. Nunca limpie desde atrás hacia adelante, ya que puede provocar una infección en el tracto urinario.

  • Con una toallita o un paño húmedo, limpie suavemente la zona del cuerpo del bebé cubierta por el pañal, dejando el pañal sucio plegado debajo del bebé. Asegúrese de hacerlo desde adelante hacia atrás.

  • Levante las piernas del bebé y deslice el pañal hacia afuera y aléjelo de él.

  • Coloque la parte trasera del pañal limpio debajo del bebé y tire la parte delantera hacia arriba por entre las piernas del bebé.

  • Pegue las cintas adhesivas o abroche cuidadosamente las esquinas del pañal hasta unirlas. Debería haber espacio para al menos dos dedos, entre el pañal y el abdomen del bebé. Si utiliza un gancho de nodriza, dirija el gancho en dirección contraria del estómago del bebé, hacia uno de los lados. Siempre ponga una mano debajo del pañal cuando esté introduciendo el gancho para no ir a pinchar accidentalmente al bebé. Los pañales con cintas del velcro eliminan la necesidad de utilizar ganchos de nodriza.

  • Coloque el pañal sucio en un recipiente que esté cerca de la mesa para cambiar pañales, para ahorrarse pasos. Sería muy útil tener un cesto que se abra al pisar un pedal. (Se recomienda arrojar las deposiciones sólidas en el baño antes de desechar el pañal al cesto. De este modo, el olor no será tan intenso y mantendrá el ambiente en mejores condiciones.)

Si bien esto parece muy técnico, el cambio de pañal no le tomará demasiado tiempo después de haberlo hecho varias veces. Algunos consejos especiales que debe recordar al cambiar un pañal son los siguientes:

  • Mantenga el pene del varón cubierto en todo momento. Podría salir por el aire un chorro de orina, mojar el cambiador, el piso o su cara o la del bebé.

  • En caso de deposiciones pegajosas, sostenga bien las piernas del bebé para que no las introduzca en el pañal.

  • Si hubo filtraciones, es posible que además de cambiar el pañal, también deba cambiarle la ropa al bebé. Es posible que también deba bañarlo, si las deposiciones se extienden por la espalda o las piernas del bebé.

  • Trate de cantarle o hablarle al bebé mientras le cambia el pañal, para mantenerlo entretenido. A los bebés de más edad se les puede dar un juguete especial reservado para el momento de cambiar los pañales.

  • El tamaño y la forma del pañal varían según el fabricante. Es posible que una determinada marca sea adecuada para su bebé durante varios meses y luego, comience a tener filtraciones. Si la marca que utiliza no le da buen resultado, pruebe otra.

Erupción del pañal por hongo

Algunas erupciones del pañal son consecuencia de un hongo llamado Candida Albicans, que suele ocasionar problemas cuando el bebé ya tiene una erupción del pañal, está tomando antibióticos o tiene aftas. Cuando aparece esta erupción, la piel se pone roja y en carne viva, cubre una zona grande y está rodeada de manchas rojas. Consulte al médico de su bebé para que le recete una crema especial para el tratamiento de la erupción y siga las instrucciones mencionadas anteriormente. Con un tratamiento adecuado, incluyendo el cambio frecuente del pañal, estas erupciones suelen mejorar en dos o tres días.

Llame al médico de su bebé si:

  • Se desarrollan ampollas o úlceras grandes (más de 2,5 centímetros [1 pulgada] de ancho)

  • La erupción no mejora en tres días

  • La erupción se endurece, se torna de color rojo brillante, en carne viva o sangra

  • Se desarrollan granos, ampollas, furúnculos, úlceras o costras

  • La erupción afecta el sueño

  • La erupción se disemina más allá de la zona cubierta por el pañal

  • Su hijo comienza a sentirse muy enfermo o tiene fiebre inexplicable

El cuidado de la erupción del pañal

La mayoría de los bebés sufrirá en algún momento una erupción del pañal sin importar el tipo de pañal que usen, es decir, de tela o desechable. Las nalgas del bebé están en contacto frecuente con la humedad, las bacterias y el amoníaco, y el pañal les roza la piel. Todos los bebés y los niños que empiezan a caminar y usan pañales corren el riesgo de contraer esta erupción. Es más fácil prevenir una erupción que curarla. Muchas erupciones se pueden tratar siguiendo estas pautas:

  • Cambio frecuente de pañales
    Lo más importante es mantener la zona seca y limpia. Controle el pañal a menudo, a cada hora si el bebé tiene una erupción, y cámbielo según sea necesario. Contrólelo al menos una vez durante la noche.

  • Limpieza suave
    Si lava la piel delicada del bebé con jabón de manera frecuente e intensa, puede debilitar la barrera de protección natural que la recubre. Lave con suavidad pero bien a fondo, incluyendo los pliegues de la piel. No utilice paños húmedos si su bebé tiene una erupción, ya que pueden provocarle ardor y aumentar la irritación. Puede bañar al bebé sentándolo en un lavabo o una tina con agua tibia, durante varios minutos cada vez que le cambie el pañal. De este modo, lo limpiará y aliviará a la vez. También puede verter agua con una jarra o utilizando una botella con atomizador sobre la zona afectada. No utilice jabón salvo que las heces sean muy pegajosas, en cuyo caso puede utilizar un jabón suave; lave delicadamente y enjuague bien. También puede utilizar bolitas de algodón embebidas con aceite para bebé.

  • Seque la zona dando palmaditas o deje al bebé sin pañales por unos instantes
    Deje secar la piel al aire libre o dando suaves palmaditas con una tela delicada o una toalla de papel. También puede utilizar un secador de pelo con aire frío. Deje la piel al aire libre el mayor tiempo posible. No ajuste demasiado el pañal ni utilice ropa interior de goma hermética. Si utiliza pañales desechables, puede hacerles orificios para permitir la entrada de aire.

  • Protección de la piel
    La gelatina de petróleo (Vaseline®) proporciona una buena capa protectora, incluso sobre la piel enrojecida y ulcerada, y se limpia fácilmente. En el mercado, existe una gran cantidad de ungüentos; compruebe cuál le da mejor resultado a su bebé y siga las recomendaciones de su médico.

    Tenga cuidado al usar polvos; asegúrese de que el bebé no los inhale. No utilice talco ya que el bebé podría contraer neumonía. Los polvos pueden retener la humedad cerca de la piel del bebé y esto empeoraría la erupción. Consulte al médico de su hijo antes de usar un polvo para pañales o remedios caseros tales como la maicena; en general estos no se recomiendan.

Cómo prevenir la erupción del pañal

Lo mejor que usted puede hacer para prevenir la erupción del pañal es cambiar los pañales inmediatamente y limpiar bien la zona. Las erupciones del pañal pueden presentarse indistintamente si utiliza pañales de tela o desechables. Ciertas marcas de pañales desechables pueden provocar erupciones en algunos niños, o bien pueden presentar sensibilidad a ciertos jabones utilizados para lavar los pañales de tela. Si utiliza pañales de tela, agregue blanqueadores marca Clorox®, Borax® o Purex® al lavado. Asegúrese de enjuagar bien el pañal.

Orina

Los bebés mojan el pañal con orina varias veces por día. La cantidad de pañales utilizados por día es un buen indicador de cuánto líquido ingiere el bebé. Aunque algunas veces es difícil determinar cuándo debe cambiarse un pañal desechable, hay que tener en cuenta que, por lo general, el bebé utiliza al menos siete pañales por día. Si el bebé moja menos de siete pañales por día, es posible que no esté ingiriendo suficiente cantidad de líquido.

Normalmente, la orina del bebé es transparente y amarillenta. Cualquier cambio en el olor y el color puede indicar un problema. Si la orina del bebé es de color amarillo oscuro o rosada, es posible que no esté ingiriendo suficiente cantidad de líquido.

Consulte al médico de su bebé si tiene dudas sobre el color y el olor de la orina de su hijo.

Deposiciones

La primera deposición del recién nacido se llama meconio. Es una sustancia pegajosa de color de pardo oscuro a negro-verdoso que se forma en los intestinos durante el desarrollo fetal. El bebé puede hacer varias deposiciones de meconio y deposiciones transicionales antes de que esta sustancia desaparezca por completo del sistema del bebé. Las deposiciones siguientes son sueltas y de un color amarillo verdoso. Los bebés alimentados con leche materna suelen tener deposiciones frecuentes, a veces, una por cada vez que comen e incluso algunas entre comidas. Dichas deposiciones suelen ser flojas, de color amarillo y tienen aspecto de semillas. Los bebés alimentados con leche de fórmula tiene deposiciones más espesas, de un color más beige.

En algunas ocasiones, los bebés pueden constiparse. Esto no es habitual en los bebés alimentados con leche materna. Si el bebé tiene deposiciones sólo una vez por día o menos y las heces son firmes y formadas, es posible que esté constipado. Un bebé constipado hace fuerza o se queja. Sin embargo, todos los bebés pequeños hacen fuerza y se quejan cuando están teniendo una deposición, porque los músculos del recto y del ano aún no están coordinados lo suficiente como para que se relajen a medida que se eliminan las heces. Si usted cree que su bebé está constipado, llame al médico de su hijo.

Si las deposiciones cambian notablemente y toman un aspecto mucoso o acuoso, es posible que el bebé tenga diarrea. En ese caso, debe consultar al médico de su hijo.

Hable con el médico de su hijo sobre las deposiciones del bebé, y la frecuencia y el aspecto que presentan.