Resumen de pruebas de diagnóstico para trastornos del sistema nervioso en los niños

¿Cuáles son algunas de las pruebas de diagnóstico para los trastornos del sistema nervioso?

La evaluación y diagnóstico del daño al sistema nervioso puede ser muy complicada. Muchos de los mismos síntomas ocurren en combinaciones diferentes entre los diversos trastornos. Para complicar aun más el proceso de diagnóstico, muchos trastornos no tienen causas, marcadores ni pruebas con resultados claros.

Ilustración de una CT de un niño

Las pruebas neurológicas para evaluar a los niños pueden incluir:

  • Tomografía computarizada (llamada también "CT" o "CAT", por sus siglas en inglés). Un procedimiento de diagnóstico por imágenes que utiliza una combinación de rayos X y tecnología computarizada para producir imágenes horizontales o axiales (llamadas con frecuencia rebanadas) del cuerpo. Una CT muestra imágenes detalladas de cualquier parte del cuerpo, incluso el cerebro, los huesos, los músculos, la grasa y los órganos. Las CT son más detalladas que los rayos X generales.

  • Electroencefalograma (EEG). Un procedimiento que registra la actividad eléctrica continua del cerebro mediante electrodos colocados en el cuero cabelludo.

  • Imágenes por resonancia magnética ("MRI", por sus siglas en inglés). Un procedimiento de diagnóstico que utiliza una combinación de imanes grandes, radiofrecuencias y una computadora para producir imágenes detalladas de órganos y estructuras dentro del cuerpo.

  • Pruebas electrodiagnósticas (por ejemplo, electromiografía y velocidad de conducción del nervio). Estudios que evalúan y diagnostican trastornos de los nervios, los músculos y neuronas motrices. Se insertan electrodos en el músculo, o se colocan en la piel encima de un nervio, músculo o grupo de músculos, y se registra la actividad eléctrica y respuesta del músculo.

  • Tomografía por emisión de positrones ("PET", por sus siglas en inglés). Una técnica de imágenes basada en computadora que proporciona una imagen de la actividad del cerebro en lugar de su estructura al medir los niveles de una molécula rastreadora inyectada, que en la mayoría de los casos es glucosa.

  • Arteriograma (llamado también angiograma). Un procedimiento que proporciona una imagnen de las arterias y/o venas que van hacia y a través del cerebro. A veces se utiliza una angiografía por tomografía computarizada, una técnica más nueva y menos invasiva.

  • Análisis del fluido espinal cerebral (llamado también punción espinal o punción lumbar). Un procedimiento usado para hacer una evaluación o diagnóstico al examinar el fluido extraído de la duramadre, un saco de líquido que está ubicada por debajo del extremo final de la médula espinal.

  • Potenciales evocados. Procedimientos que registran la respuesta eléctrica del cerebro a estímulos visuales, auditivos y sensoriales.

  • Mielograma. Un procedimiento que utiliza colorante inyectado en el canal espinal para hacer que la estructura sea claramente visible en los rayos X. Aunque en una época fue común, ahora se usa poco.

  • Ultrasonido (llamado también sonografía). Una técnica de diagnóstico por imágenes que utiliza ondas sonoras de alta frecuencia y una computadora que crea imágenes de los vasos sanguíneos, tejidos y órganos. Los ultrasonidos son utilizados para ver órganos internos y su función, y para evaluar el flujo de la sangre a través de los vasos sanguíneos.

  • Neurosonografía. Un procedimiento que usa ondas sonoras de ultra alta frecuencia que le permite al médico evaluar las estructuras del sistema nervioso, incluso el cerebro, la médula espinal y otras estructuras.

¿Cómo debería de preparar a mi hijo para pruebas neurológicas?

  • Bebés. Usted no puede explicarle este examen a un bebé, pero puede ayudarle a sentirse más seguro durante la prueba al llevar una manta especial, juguete o chupete. Para realizar muchos de los estudios, se da un sedante o anestesia, lo que requiere que el niño haga ayuno antes del procecimiento. Usted podrá amamantar a su bebé o darle su biberón de jugo o fórmula una vez que el técnico le indique que su bebé puede comer.

  • Bebés y niños en edad preescolar. Los niños pequeños recuerdan solamente por un período corto de tiempo, así que el mejor momento para hablar sobre la prueba es justo antes de que esté listo para ir al hospital. Explique a su hijo que van hacia el hospital a tomarle unas fotografías que el médico necesita para ayudarle a mejorar. Trate de usar palabras simples. En el caso de las pruebas que requieren que el niño se mantenga quieto, como una tomografía computarizada (CT), un estudio de imágenes por resonancia magnética (MRI) o una punción lumbar, es posible que se aplique un sedante o anestesia para garantizar que las imágenes tengan una buena calidad y para evitar el dolor. Es importante ser honesto con su hijo. Si la prueba va a ser incómoda, asegúrese de hablar sobre eso y decirle que está bien llorar. Ya que los niños a esta edad tienen miedo de ser separados de sus padres, hágale saber que su mamá o papá lo acompañarán tanto como sea posible. Cuando llegue al hospital, lleve un libro favorito, juguete o manta.

  • Niños en edad escolar. Los niños en edad escolar tienen buena imaginación. Si les dice la verdad, podrían imaginar algo mucho peor que lo que en realidad es la prueba. El día de la prueba dígale a su hijo que irá al hospital a que le tomen unas fotografías. Dígale que las fotografías le ayudarán al médico a decidir cómo hacerlo sentir mejor. Use palabras simples. Sea honesto. Trate de decirle a su hijo exactamente lo que pasará. Si la prueba de su hijo será incómoda asegúrese de decirle que está bien que llore. Cuando llegue al hospital, lleve un libro favorito juguete o juego. Según la edad y la madurez emocional del niño, es posible que sea necesario utilizar un sedante o anestesia.