Una astilla es un fragmento puntiagudo de madera, vidrio u otro material, que se puede incrustar debajo de la piel. Las astillas pequeñas y superficiales, generalmente, se pueden extraer en el hogar.
Tranquilice a su hijo y hágale saber que usted puede ayudarle.
Lávese las manos.
Lave la zona alrededor de la astilla con agua y jabón.
Utilice una aguja o pinzas esterilizadas.
Si una parte de la astilla sobresale de la piel, intente tirar suavemente de ella con las pinzas esterilizadas.
Si la astilla está cerca de la superficie, pero debajo de la piel, pinche suavemente la piel que se encuentra sobre la astilla con la aguja esterilizada e intente tirar de ella con las pinzas.
Si la astilla está profundamente incrustada o no puede extraerla después de uno o dos intentos, llame al médico de su hijo.
Observe la herida para detectar señales de infección, como un aumento de temperatura, hinchazón, enrojecimiento, secreciones o dolor. Si nota cualquier señal de infección, llame al médico de su hijo. Los antibióticos pueden ser necesarios.
Si las astillas son muy pequeñas, indoloras y superficiales, puede dejarlas como están. Con el tiempo, se quitarán de la piel por su cuenta.
Conéctese con nosotros:
Descarga nuestra App: