Varicela

¿Qué es la varicela?

La varicela es una enfermedad altamente contagiosa que generalmente se presenta durante la infancia. Para la edad adulta, más del 90 % de los estadounidenses padecieron varicela. Desde mediados de los 90, la mayoría de los niños han sido vacunados contra la infección.

La enfermedad es causada por el virus varicela-zóster (VZV), un tipo del virus del herpes. Se propaga por contacto directo de persona a persona o a través del aire al toser o estornudar.

Hasta 1995, la varicela era común y casi nadie llegaba a la edad adulta sin haberla contraído. Sin embargo, la introducción de la vacuna contra la varicela en 1995 causó un descenso en la incidencia de la enfermedad en todas las edades, particularmente desde el primero hasta el cuarto año de vida. La vacuna contra la varicela puede ayudar a prevenir esta enfermedad y se recomiendan 2 dosis de la vacuna para los niños, adolescentes y los adultos que todavía no están inmunizados (no contrajeron la enfermedad).

¿Cuáles son los síntomas de la varicela?

En los niños, los síntomas generalmente son leves, pero pueden poner en peligro la vida de los bebés, los niños y adultos por más que gocen de buena salud, así como de las personas que tienen problemas del sistema inmunológico. Los siguientes son los síntomas más comunes de la varicela. Sin embargo, cada niño puede experimentar los síntomas de manera diferente. Los síntomas pueden incluir:

  • fatiga e irritabilidad 1 o 2 días antes de que aparezca la erupción;

  • erupción roja con comezón que evoluciona en pequeñas ampollas con líquido en el tronco, la cara, el cuero cabelludo, debajo de las axilas, dentro de la boca y en la parte superior de los brazos y las piernas;

  • fiebre;

  • sensación de malestar general;

  • pérdida del apetito;

  • dolores musculares y en las articulaciones; y

  • tos o goteo nasal.

Los síntomas de la varicela pueden ser similares a los de otros problemas dermatológicos o problemas médicos. Si una persona que ha sido vacunada se expone a la enfermedad, puede presentar síntomas más leves con una erupción menos grave sin fiebre o con una fiebre leve. Siempre debe consultar al médico de su hijo para obtener un diagnóstico.

¿Cómo se contagia la varicela?

Una vez infectado, la varicela tarda entre 10 y 21 días en desarrollarse. La varicela es contagiosa durante 1 o 2 días luego de la aparición de la erupción y hasta que las ampollas se sequen y hayan formado costras. The blisters usually dry and become scabs within 4 to 5 days of the onset of the rash, but there are usually several new crops of blisters developing during this time period. Los niños deben permanecer en casa y lejos de otros niños hasta que todas las ampollas hayan formado costras.

Los miembros de la familia que no padecieron varicela tienen un 90 % de posibilidades de infectarse cuando otro miembro en el hogar fue infectado.

¿Cómo se diagnostica la varicela?

Normalmente, la varicela se diagnostica en base a una historia médica y un examen físico completo de su hijo. La erupción en la piel de la varicela es única y generalmente basta con un examen físico.

¿Cuál es el tratamiento para la varicela?

El médico de su hijo determinará el tratamiento específico para la varicela según:

  • la edad, el estado general de salud y la historia médica de su hijo;

  • qué tan avanzada se encuentre la enfermedad;

  • la tolerancia que su hijo tenga a determinados medicamentos, procedimientos o terapias;

  • las expectativas de la evolución de la afección; y

  • su opinión o preferencia.

El tratamiento de la varicela puede incluir lo siguiente:

  • acetaminofén para reducir la fiebre (no deben usarse aspirinas);

  • antibióticos para las infecciones bacterianas que puedan producirse (los antibióticos no tratan la infección de la varicela);

  • loción de calamina (para aliviar la comezón);

  • drogas antivirales (en casos agudos);

  • reposo;

  • aumento en el consumo de líquidos (para evitar la deshidratación); y

  • baños fríos con bicarbonato de soda (para aliviar la comezón).

Los niños no deben rascarse las ampollas porque podría producir infecciones bacterianas secundarias. Mantenga las uñas cortas para disminuir la probabilidad de que se rasquen.

Inmunidad contra la varicela

La mayoría de las personas que han padecido varicela, son inmunes por el resto de su vida. Sin embargo, el virus permanece latente en el tejido nervioso y puede reactivarse y provocar herpes zóster (culebrilla) a una edad más avanzada. Rara vez, ocurre un segundo brote de varicela. Un análisis de sangre puede confirmar la inmunidad a la varicela en personas que no están seguras de haber tenido la enfermedad.

¿Qué complicaciones están comúnmente asociadas con la varicela?

La varicela puede provocar complicaciones. Las personas más susceptibles a casos graves de varicela son los bebés, los adultos, las mujeres embarazadas y las personas con problemas en sus sistemas inmunológicos. Los niños por nacer también pueden infectarse si la madre no tuvo varicela antes del embarazo. Incluso un niño saludable puede contraer complicaciones por una varicela, generalmente infecciones dermatológicas graves. Las complicaciones de la varicela pueden incluir:

  • infecciones bacterianas secundarias;

  • neumonía;

  • encefalitis (inflamación del cerebro);

  • ataxia cerebelosa (coordinación muscular defectuosa);

  • mielitis transversa (inflamación de la médula espinal);

  • síndrome de Reye (una condición grave que afecta a los principales órganos y sistemas del cuerpo); y

  • muerte.