Requisitos y elegibilidad de los participantes

Los participantes deben de cumplir con los siguientes requisitos para inscribirse al Programa pediátrico de control del peso:

  • El niño o adolescente debe tener un Índice de Masa Corporal (IMC) mayor percentil 95 de acuerdo con la tabla de IMC de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés). Es posible que los niños o los adolescentes con un IMC mayor al percentil de 85 también cumplan con los requisitos para ingresar al programa si su padre o madre tienen sobrepeso, si tienen alguna complicación médica (comorbilidad) o historial familiar de comorbilidades. Puede utilizar esta calculadora para determinar el IMC de su hijo. Luego, compare el valor con estas tablas:

    IMC en el percentil 95
    Edad Niñas Niños
    8 20.6 20.0 
    9 21.8 21.0
    10  23.0  22.2 
    11 24.0 23.2 
    12  25.2  24.2 
    13  26.2  25.2 
    14  27.2  26.0 
    15  28.0  26.8 
    IMC en el percentil 85
    Edad Niñas Niños
    8 18.32 17.96
    9 19.12 18.63
    10  19.98 19.39
    11 20.87 20.20
    12  21.74 21.02
    13  22.58 21.85
    14  23.35 22.66
    15  24.04 23.45
  • Por lo menos un tutor legal mayor de 18 años debe aceptar asistir a cada sesión semanal con su hijo.

  • Las familias deben comprometerse antes de inscribirse a no faltar a más de dos sesiones seguidas. También deben hacer un esfuerzo para asistir a todas o a casi todas las 25 sesiones. Esto garantiza el progreso del niño y que su éxito no sea interrumpido.

  • Tanto el padre como el niño deben QUERER participar en el programa.

Tome en cuenta: Hacer cambios duraderos en los hábitos de alimentación y de ejercicio es muy difícil y requiere de un compromiso serio por parte del niño y de sus padres. Para inscribirse, tanto el niño como el tutor legal deben aceptar terminar el programa juntos. El trabajo en equipo es la clave para el éxito. No podemos inscribir a niños que no están interesados en hacer este compromiso, incluso si sus padres están muy interesados. Si un niño no está dispuesto a comprometerse con el programa, tal vez sea mejor retrasar la participación hasta que el niño esté listo.

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