Hipoplasia y aplasia del pulgar (pulgar pequeño o ausente)

¿Qué es la hipoplasia del pulgar? ¿Qué es la aplasia del pulgar?

La hipoplasia del pulgar, también conocida como pulgar hipoplásico, es una afección en la que el pulgar de los niños es más pequeño de lo normal. La aplasia del pulgar es una afección en la que el pulgar está completamente ausente. La hipoplasia o la aplasia del pulgar a menudo ocurren en niños con deficiencia radial longitudinal. Estas afecciones pueden ser genéticas y pueden ser síntomas de diferentes afecciones que también afectan a otros sistemas de órganos del cuerpo.

¿Cómo se diagnostican la hipoplasia y la aplasia del pulgar?

El médico de su bebé generalmente detectará la hipoplasia o aplasia del pulgar durante el primer examen al recién nacido. Si el médico sospecha que hay hipoplasia o aplasia del pulgar, buscará otras diferencias que puedan estar asociadas con estas afecciones. Las radiografías también pueden ayudar al médico a ver mejor la estructura del pulgar de su bebé.

¿Cómo se tratan la hipoplasia y la aplasia del pulgar?

El tratamiento depende de la gravedad de la hipoplasia y la aplasia. Trabajamos con cada paciente y su familia para analizar todas las opciones e identificar la mejor según las necesidades únicas de cada uno. A veces, el pulgar puede ser más pequeño de lo normal, pero los niños pueden tener un funcionamiento normal, en cuyo caso no se necesita cirugía. Si el pulgar está débil o no se puede mover correctamente, se puede recomendar una cirugía de reconstrucción del pulgar, además de la terapia ocupacional.

Si la hipoplasia del pulgar es muy grave o el pulgar está ausente (aplasia del pulgar), se puede recomendar la realización de una cirugía de pollicización del dedo índice. En esta cirugía, se crea un pulgar funcional al mover otro dedo a la posición del pulgar. La terapia ocupacional es fundamental para asegurar el éxito después de cualquier cirugía.