Las garrapatas son pequeñas criaturas tipo insecto que viven en el césped, arbustos, áreas boscosas y a lo largo de la playa. Adhieren sus cuerpos sobre un humano o animal huésped y prefieren las áreas con pelo, como el cuero cabelludo, detrás de la oreja, en las axilas y la ingle, y también entre los dedos de las manos y de los pies. Las picaduras de garrapatas ocurren durante la noche y con más frecuencia en los meses de la primavera y el verano.
No toque la garrapata con su mano desnuda. Si no tiene un par de pincitas, lleve a su hijo al centro de atención médica más cercano donde se puede retirar la garrapata con seguridad.
Use un par de pincitas para retirar la garrapata. Agarre la garrapata firmemente por su boca o cabeza lo más cerca posible de la piel de su hijo.
Hale suave y constantemente sin torcer hasta que se suelte. No apriete la garrapata, y no use vaselina, solventes, cuchillos ni un fósforo encendido para matar la garrapata.
Guarde la garrapata en un recipiente o bolsa plástica para que pueda ser examinada en busca de enfermedad si es necesario.
Lave bien al área de la picadura con agua y jabón, y aplique una loción o crema antiséptica.
Llame al médico de su hijo para averiguar acerca de atención de seguimiento.
Independientemente de cuán cuidadoso sea con los animales en su casa, o cuántas precauciones tome cuando su hijo está jugando al aire libre, las mordeduras y picaduras de insectos son algunas veces inevitables.
Mantenerse calmado y conocer algunas técnicas básicas de primeros auxilios puede ayudarle a su hijo a superar el miedo y el trauma de mordeduras y picaduras.
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