Asma y el embarazo

Tener asma no necesariamente implica un embarazo complicado. Con una atención adecuada del asma y los cuidados médicos apropiados durante el embarazo, la mayoría de las mujeres con asma experimentan embarazos saludables.

El asma es una de las enfermedades más comunes que pueden complicar un embarazo. En algunos casos, el diagnóstico del asma recién llega cuando una mujer queda embarazada. El asma afecta a una mujer durante el embarazo de maneras diferentes, por ejemplo:

  • Más de un tercio de las mujeres no experimentan ningún cambio en los síntomas del asma.

  • Más de un tercio de las mujeres embarazadas experimentan síntomas más severos del asma.

  • Menos de un tercio de las mujeres embarazadas experimentan síntomas más leves del asma.

  • Los síntomas puede agravarse a medida que aumenta el peso con el embarazo.

Es importante tratar debidamente el asma durante el embarazo. El asma no controlada puede hacer que la madre tenga menos oxígeno, lo que, a su vez, puede afectar al feto.

El asma no controlada puede derivar en cualquiera de las complicaciones que se enumeran a continuación.

Posibles complicaciones para la madre

El asma, cuando no está controlada, puede someter a la madre y también al feto a un estrés excesivo. La falta de oxígeno afectará no solo a la madre, sino también al feto. Otras complicaciones del asma no controlada para la madre incluyen las siguientes:

  • Preeclampsia (también conocida como toxemia en el embarazo). Trastorno del embarazo caracterizado por el aumento de la presión sanguínea, la retención de líquidos y el nivel de proteínas en la orina.

  • Hipertensión gestacional. Es la presión sanguínea alta durante el embarazo.

  • Hiperémesis gravídica. Trastorno del embarazo caracterizado por vómitos persistentes, pérdida de peso y desequilibrio de líquidos y electrolitos.

  • Hemorragia vaginal. Es el sangrado a través de la vagina.

Posibles complicaciones para el feto

La falta de oxígeno para el feto desde la madre puede derivar en numerosos problemas de salud para el feto, que incluyen los siguientes:

  • Mortalidad perinatal.

  • Retraso del crecimiento intrauterino. Crecimiento deficiente del feto en el útero, lo que hace que el feto sea más pequeño que lo normal para su edad gestacional.

  • Nacimiento prematuro.

  • Bajo peso al nacer.

  • Hipoxia neonatal. Cantidad inadecuada de oxígeno para el feto.

¿Es seguro usar los medicamentos para el asma durante el embarazo?

La mayoría de los medicamentos para el asma no son nocivos para el feto ni el bebé lactante. De hecho, el asma no controlada puede poner a la madre y al feto en mayor riesgo que el medicamento usado para controlarlo. Siempre consulte a su proveedor de atención médica para obtener un diagnóstico y elaborar un plan de tratamiento del asma específico, adaptado a sus síntomas particulares.

¿De qué manera una mujer embarazada puede reducir las probabilidades de padecer un ataque de asma?

El American Congress of Obstetricians and Gynecologists recomienda que las mujeres embarazadas sigan estos pasos para reducir el riesgo de un ataque de asma durante el embarazo:

  • Evite los desencadenantes del asma, incluido el tabaco para fumar y otras sustancias irritantes.

  • Continúe con los medicamentos para el asma durante el embarazo, parto y alumbramiento, según la recomendación de su proveedor de atención médica.

  • Realice actividad física con moderación (use los medicamentos según corresponde si tiene asma inducido por la actividad física y consulte a su proveedor de atención médica antes de comenzar un programa de ejercicio).

  • Asegúrese de vacunarse contra la gripe si atravesará su segundo o tercer trimestre de embarazo durante la temporada de gripe (otoño-invierno).

¿En qué momento una embarazada con asma debería recibir tratamiento médico de emergencia?

Incluso cuando se implementa un plan adecuado de control del asma, las embarazadas deben ser conscientes de ciertas señales de advertencia que pueden indicar un ataque de asma, tales como las siguientes:

  • Los medicamentos actuales no brindan una mejora rápida de los síntomas.

  • La mejora que brindan los medicamentos no se mantiene durante el mismo tiempo que antes.

  • Respirar es más difícil.

  • El recuento de patadas del feto desciende. Esto puede indicar malestar del bebé.

Siempre hable con su proveedor de atención médica sobre las señales de advertencia de ataques de asma a las que debe prestar atención y cuándo debería solicitar tratamiento médico de emergencia.