Reparación del manguito rotador
Si usted sufre una lesión en el manguito rotador, es posible que necesite una reparación quirúrgica. Esto puede incluir raspar el hueso para quitar los espolones óseos que comprimen el hombro, o reparar tendones o músculos desgarrados en el hombro. Las técnicas quirúrgicas que pueden usarse para reparar un desgarro del manguito rotador incluyen la artroscopia, cirugía abierta o una combinación de estos dos tipos. El objetivo de la cirugía de reparación del manguito rotador es ayudar a restaurar el funcionamiento y la flexibilidad del hombro y aliviar el dolor que no puede controlarse con otros tratamientos.
Las lesiones en los hombros son comunes. Los atletas y los obreros de la construcción suelen tener lesiones en el manguito rotador debido a los movimientos repetitivos y al uso excesivo del hombro. El manguito rotador puede dañarse a causa de una caída u otra lesión en el hombro. También puede producirse daño lentamente con el paso del tiempo. El daño puede deberse a las siguientes causas:
El dolor recurrente, la capacidad limitada para mover el brazo y la debilidad muscular son los síntomas más frecuentes.
Si los tratamientos médicos no son satisfactorios, la cirugía de reparación del manguito rotador puede ser una solución eficaz. Los tratamientos médicos para las lesiones del manguito rotador pueden incluir lo siguiente:
La cirugía de reparación del manguito rotador puede realizarse con un artroscopio. Un artroscopio es un instrumento pequeño con forma de tubo que se introduce en una articulación. Está formado por un sistema de lentes, una videocámara pequeña y una luz para ver. La cámara está conectada a un sistema de monitoreo que le permite al proveedor de atención médica ver una articulación a través de una incisión muy pequeña. El artroscopio suele usarse junto con otros instrumentos que se pasan por otra incisión.
Si la lesión del manguito rotador no puede repararse mediante una artroscopia, puede realizarse una reparación abierta. En algunos casos, puede ser necesario el uso de un injerto de tendón o reemplazo de articulación.
Es posible que haya otras razones para que su proveedor de atención médica recomiende una reparación del manguito rotador.
Al igual que con cualquier procedimiento quirúrgico, pueden surgir complicaciones. Las siguientes son algunas posibles complicaciones:
La cirugía puede no aliviar el dolor y la debilidad en la articulación. Es posible que no recupere toda la amplitud de movimiento en la articulación del hombro.
Los nervios o los vasos sanguíneos de la zona de la cirugía pueden resultar dañados. Esto ocasiona debilidad o entumecimiento.
Es posible que existan otros riesgos según su afección específica. Recuerde hablar con su proveedor de atención médica sobre cualquier preocupación que tenga antes del procedimiento.
Una reparación del manguito rotador se puede hacer en forma ambulatoria o durante su internación en un hospital. Los procedimientos pueden variar según su afección y la forma de trabajo de su proveedor de atención médica.
La reparación del manguito rotador puede realizarse mientras usted duerme bajo anestesia general, o mientras permanece despierto, con anestesia local o regional. Si se usa anestesia regional, no tendrá sensibilidad en el hombro. El tipo de anestesia que se usará dependerá del procedimiento específico que se realice. Su proveedor de atención médica conversará sobre esto con usted antes de la cirugía.
En general, en una cirugía de reparación del manguito rotador se sigue este proceso:
Después de la cirugía, lo trasladarán a la sala de recuperación, donde permanecerá en observación. El proceso de recuperación variará en función del tipo de anestesia que se le administre y el tipo de cirugía que se realice. Le controlarán la circulación y la sensibilidad del brazo. Una vez que su presión arterial, pulso y respiración estén estables y que usted esté alerta, lo llevarán a su habitación en el hospital o le darán el alta del hospital para que regrese a su hogar.
Probablemente le coloquen un inmovilizador o cabestrillo antes de que se vaya a su hogar.
Una vez que esté de vuelta en su hogar, es importante que mantenga la zona quirúrgica limpia y seca. Su proveedor de atención médica le dará instrucciones específicas sobre cómo bañarse. Si se usaron puntos o grapas quirúrgicas, se le quitarán durante una visita de control en el consultorio.
Tome un calmante para el dolor (analgésico) de acuerdo con las recomendaciones de su proveedor de atención médica. La aspirina y otros medicamentos determinados contra el dolor pueden aumentar las probabilidades de sangrado. Asegúrese de tomar solo los medicamentos que le hayan recomendado.
Para ayudar a reducir la hinchazón, posiblemente le indiquen que se aplique una bolsa de hielo sobre el hombro varias veces al día durante los primeros días. Debe mantener el cabestrillo o inmovilizador colocado según las instrucciones de su proveedor de atención médica.
Su proveedor de atención médica se ocupará de que reciba un programa de ejercicios de rehabilitación para ayudarle a recuperar fuerza muscular, flexibilidad y el funcionamiento de su hombro.
Avise a su proveedor de atención médica si nota cualquiera de los siguientes síntomas:
Podrá retomar su alimentación habitual a menos que su proveedor de atención médica le indique otra cosa.
Usted no debe conducir un automóvil hasta que su proveedor de atención médica le diga que puede hacerlo. Es posible que deba limitar otras actividades. La recuperación completa de la cirugía puede tardar varios meses.
Su proveedor de atención médica puede darle instrucciones adicionales o alternativas después del procedimiento, según su situación en particular.
Antes de aceptar hacerse la prueba o el procedimiento, confirme si sabe lo siguiente:
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